Ejemplos con garitas

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Existen cinco garitas correspondientes a cada ángulo del pentágono, elegantemente construidas en forma de púlpito con piedras labradas.
La torre, inacabada, de planta cuadrangular, con el último cuerpo octogonal rematado con gárgolas y garitas en sus esquina.
En el ábside y en el testero norte del transepto se conservan tres garitas esquineras desprovistas de almenas, que aunque no funcionales refuerzan la sensación defensiva y militar del templo.
En su barbería, ubicada en la esquina de Las Garitas también soldaba piezas de latonería y fabricaba silleticas para niños, mesitas, jaulas y otros muebles de fácil elaboración.
El Puerto de Entrada de Otay Mesa es una de las dos garitas de entradas en San Diego, California, la otra es el Puerto de entrada de San Ysidro seis millas al oeste.
Antiguamente, las carreteras del sector eran de piedras y las puertas de las casas eran de madera y mecate conocidas como Garitas.
Éstas están presentes en el antepecho sobre matacanes, en las almenas de la fachada norte, en las garitas y en las troneras de orbe dispuestas sobre el citado antepecho, elementos, todos ellos, instalados con fines ornamentales.
Antiguos bocetos muestran garitas sobre cada uno de estos contrafuertes, con un pasillo sobre un muro que las conectaba.
La casa-torre tenía garitas cuadradas en las esquinas opuestas diagonalmente y acabada con gruesos muros.
Las garitas ocupan el centro de las azoteas y son de madera, recubiertas por chapas de zinc.
Los sartos son garitas de piedras emblemáticas de la región, y una cofradía lleva el nombre.
El escudo del propietario aparece en las garitas y sobre el arco de entrada.
Presenta planta en el formato rectangular, con baluartes pentagonales en los vértices, rematados por garitas.
Es de creer que las primeras garitas eran de madera, como los matacanes, y que se colocaban en tiempos de guerra.
Había garitas en las más viejas fortificaciones europeas de la Edad Media.
A ambos lados, se levantan dos garitas rematadas con chapiteles.
Sólo se podía acceder originariamente a ella por una escalera de madera que se retiraba en caso de peligro y se encuentra equipada con cuatro garitas.
También en las murallas se construyen cadalsos, es decir, estructuras de madera suspendidas sobre el vacío a modo de refugio a la vez que de aumento de precisión del campo de tiro de los ballesteros, o diversas garitas aprovechando salientes en los muros de las murallas.
Su cara norte es la que reúne los mayores valores artísticos y ornamentales: un panel superior central que integra un escudo, un balcón corrido en la primera planta apoyado sobre columnas que conforman un pórtico y dos garitas rematadas por chapiteles.
Tenía ganas de pisar tierra española, de pasear por aquellas viejas murallas con sus garitas, sus baluartes y sus cañones, de ver el hermoso golfo de Cádiz.
En la parte inferior, junto a la masa azul del mar, extendían las fortificaciones españolas sus viejos baluartes, rematados los ángulos por garitas salientes de piedra.
No había español ni española que no sintiera en su alma el ultraje, y en su propio rostro la bofetada que a España dio la kabila de Anyera, profanando unas piedras y destruyendo nuestras garitas en el campo de Ceuta.
Por la puerta del príncipe salía un chorro de luz vivísima, que cortaba con un gran rectángulo las negras sombras del adoquinado, a su reflejo distinguíanse los centinelas, armas al brazo, a la puerta de sus garitas, gentes de medio pelo, soldados y criados de servicio, por ser aquel día domingo, poblaban los jardines, ya sentados, ya paseando, algunos grupos de chiquillos trasnochadores corrían de acá para allá con gran algazara, riéndose porque se caían, riéndose porque se levantaban, riendo siempre con esa alegría de la infancia, espontánea y comunicativa, que recuerda la alegría de los pájaros cuando saludan al alba.
Caminando junto a la carretera polvorienta, sin ver otras caras que las de los carreteros que marchaban perezosamente tras sus vehículos, o las de los guardias de Consumos sentados ante sus garitas, Juanito se encontraba mejor.
Los capacetes que cubren estas garitas descuellan sobre el cuerpo de la torre, dibujando en el cielo una especie de corona feudal que ennoblece aquel esbeltísimo monumento.
Cuadrada por la parte inferior, conviértese luego en octógona, y resaltan de ella ocho garitas preciosísimas, que la hacen más voluminosa por arriba que por abajo.
Solo, perseguido, y cercado por todas partes, guardose de intentar la salida de la ciudad, cuyas garitas estaban vigiladas, y pasando sobre millares de peligros, logró por fin refugiarse en la choza de un indio, a las orillas del río de Challapampa.
, que hallando lenta la acción de la justicia, querían hacerla por su mano, y vigilaban las garitas y las casas de los agentes extranjeros.
Anduvieron como unos treinta pasos y se detuvieron en una pequeña explanada de rocas, en que habían labrado como unos asientos, que querían parecer garitas, donde el centinela pudiera sentarse.
Hay todavía, en los fosos, terrenos encharcados con hierbajos y espadañas, poternas llenas de hierros, garitas desmochadas, escalerillas musgosas, y alrededor, en los glacis, altas y románticas arboledas, malezas y boscajes y verdes praderas salpicadas de florecillas.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba