Ejemplos con petimetra

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Los flirteos entre ambos sexos ya habían sido mostrados en El ciego de la guitarra, pero Goya muestra aquí a la petimetra y al cortejo, como se llamaba entonces al amante.
Goya presenta usos y costumbres de la sociedad madrileña, como el hombre que observa con monóculos los objetos, le petimetra que señala con el abanico algún producto y quien negocia precios con el vendedor.
Explicación de esta estampa del manuscrito del Museo del Prado: El grupo de brujas que sirve de peana a la petimetra, más que necesidad, es adorno.
En el dibujo preparatorio a la sanguina, conservado en el Museo del Prado,la petimetra lleva careta en lugar de antifaz.
Sin embargo, la mujer, sublimada por el cristianismo a esfera muchas veces superior a la del hombre, la mujer, objeto siempre en nuestra patria del culto de los caballeros, de las trovas de los poetas, de los agasajos de los rondadores nocturnos, la mujer, reina de su casa en Andalucía, lujosa, petimetra y holgazana a expensas del sudor del marido, lleva aquí la parte más dura de los trabajos agrícolas.
Leonardo, pobre, caído desde la altura de su noble origen a la miseria de su humilde existencia, se ocupaba en enamorar escofieteras y tal cual petimetra de la clase media, perdida a prima noche en los laberintos de Maravillas o Lavapiés.
Martín oía con asombro las palabras de la petimetra, que revelaban sinceridad profunda, y no fue indiferente a la expresión de sus sentimientos, libres en aquel momento de las afectaciones de la coquetería y de los arrebatos del orgullo.
No llegaba su rigorismo filosófico-político hasta el extremo de darle aquella entereza ascética que es propia de los que cultivan el alma a costa del cuerpo, mas a pesar de su fascinación, que era grande, la petimetra, como ser moral, había descendido bastante a sus ojos.
El joven filósofo, a pesar del predominio que la inteligencia tenía en su espíritu sobre toda facultad, poseía también en alto grado, según la escuela revolucionaria de Rousseau, el sentimiento de la Naturaleza, y fuerza es confesarlo, en aquel momento la petimetra no le inspiraba ningún afecto puro.
La petimetra no se los hubiera dejado imponer, porque imperaba como reina absoluta en la casa, pero el escándalo hubiera sido espantoso, y los Enríquez de Cárdenas se habrían creído deshonrados por.
Por de pronto, Martín acogía con joviales respuestas las raras proposiciones de la petimetra, y decía:.
-¡Oh! Pues no hay cosa más sencilla -dijo la petimetra incorporándose y echando más atrás el manto, que dejó descubierto su cuerpo, vestido con elegante chaquetilla de terciopelo negro recamado de pasamanería-.
¿Y el dinero? Pero no tratemos de expresar la cavilación incesante de nuestro desgraciado amigo, y asistamos desde luego a su conferencia con la petimetra, que es, a no dudarlo, uno de los acontecimientos capitales de la presente historia.
El señor consejero de la Sala de Penas vio en el ademán de la petimetra una expresión de desprecio.
El señor consejero de la Sala de Penas vio en el ademán de la petimetra una expresión de desprecio.
¿Y el dinero? Pero no tratemos de expresar la cavilación incesante de nuestro desgraciado amigo, y asistamos desde luego a su conferencia con la petimetra, que es, a no dudarlo, uno de los acontecimientos capitales de la presente historia.
Por de pronto, Martín acogía con joviales respuestas las raras proposiciones de la petimetra, y decía:.
No llegaba su rigorismo filosófico-político hasta el extremo de darle aquella entereza ascética que es propia de los que cultivan el alma a costa del cuerpo, mas a pesar de su fascinación, que era grande, la petimetra, como ser moral, había descendido bastante a sus ojos.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba