Ejemplos con mimo
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Esta limitación en los medios, especialmente en lo que a sonido se refiere, favorece la supervivencia de un teatro esencialmente popular, donde se priman las disciplinas y habilidades más físicas como la danza, el mimo, algunos tipos de teatro de títeres, como los espectáculos con cabezudos, y, en general, un teatro donde los gestos son más exagerados y vistosos, como el Slapstick.
Ese mimo año se establecieron las normas que debían regir al personal de la basílica de la Vega.
El ganador fue el Mimo malagueño Manolo Carambolas, que con sus gestos y movientos mecánicos consiguió ganarse la confianza y los votos de los espectadores.
La disposición descentrada del mimo provoca un desequilibrio entre los dos cuerpos laterales de cierre.
Un Quijote sin mancha es una película mexicana que fue protagonizada por el mimo y célebre comediante de México: Mario Moreno Cantinflas.
En ella actúan Vicente Fernández, Amparo Muñoz, Jorge Rivero y Eduardo de Peña El Mimo.
A su regreso a Inglaterra obtuvo la protección de su tío Moses Kean, un mimo, ventrílocuo y en general un artista, quien, además de hacer que continuara sus estudios de pantomima, lo inició en el estudio de Shakespeare.
Otros personajes de esta serie son Nutty, con su locura por los dulces, Mimo, que es mudo, Giggles, Disco Bear, Flippy, Lifty y Shifty, que siempre aparecen juntos.
Se realiza presionando los cuatro botones de ataque al mimo tiempo.
Su genio es vivo, acaso un poco caprichoso, por lo mismo que ha sido siempre el mimo de la casa.
Rabia, grita y casi muerde, en los días que le pica la maldita enfermedad, pero se presenta doña Visita, y en seguida se contiene, sufre en silencio, gime como un niño, y basta que ella le diga una palabrita dulce o le haga un mimo, para que a Su Eminencia se le caiga la baba de gusto ¡La quiere mucho!.
Y se puso a echar sus miguitas a los peces, hablándoles con el cariño y el mimo de una madre que acaricia a sus hijuelos.
Nucha le ofrecía de vez en cuando golosinas y calderilla, y el rapaz, como suele suceder a las fieras domesticadas, contrajo excesiva familiaridad y apego, y costaba trabajo echarle de allí, encontrándosele por todas partes, donde menos se pensaba, a manera de gatito pequeño viciado en el mimo y la compañía.
