Ejemplos con faramallas
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
-Pamplinas, vuelvo a decir, recomendándote por milésima vez, pobre Tuste, que no seas pamplinoso, y que todas las faramallas bonitas que has aprendido de Castelar las guardes para pasar el rato.
-Pamplinas, vuelvo a decir, recomendándote por milésima vez, pobre Tuste, que no seas pamplinoso, y que todas las faramallas bonitas que has aprendido de Castelar las guardes para pasar el rato. En la vida real, eso no sirve para nada. Yo no soy señora, aunque como las señoras me visto, yo, para decirlo de una vez, soy una mujer mala, una... que se ha dejado poner en la frente el letrero de mujer mala... Llevo ese letrero, que leen todos los que me conocen... No conviene que me vean contigo por la calle, pero no es porque yo me avergüence de ti, ni porque tu compañía me deshonre, sino porque en mi condición de mujer mala, si me ven contigo creerán lo que no es... El hombre con quien ahora estoy, Facundo, ya sabes... es bueno y no repara en que yo gaste lo que quiera... pero tiene la contra de que es algo celoso, y por cualquier cuento, por cualquier chismajo que le lleve un adulón o un mal intencionado, se pone insufrible... Con que... da media vuelta, Tustito, y déjame sola... Las señoras de mi categoría van mejor solas que bien acompañadas. Abur».
