Ejemplos con fablar

Plaziale oyr los omes auisados e graçiosos e notaua mucho lo que dellos oya, sabia fablar entender latin, leya muy bien, plazianle muchos libros e estorias, oya muy de grado los dizires rimados e conoçia los viçios dellos, auia grant plazer en oyr palabras alegres e bien apuntadas, e aun el mesmo las sabia bien dizir.

él se vino de la Corte e se iba derecho desta villa a la villa de Huelva para fablar y verse con un cuñado.

Sucederá tras esto, luego en continente, que ella ponga los ojos en el caballero y él en los della, y cada uno parezca a otro cosa más divina que humana, y, sin saber cómo ni cómo no, han de quedar presos y enlazados en la intricable red amorosa, y con gran cuita en sus corazones por no saber cómo se han de fablar para descubrir sus ansias y sentimientos.

Et don Alvar Háñez díxol’ que vinía por demandar una de sus fijas para con que casase, mas que quería que gelas mostrasse todas tres et quel’ dexasse fablar con cada una dellas, et después que escogería cuál quisiesse.

* Dizen por mal uso complir mester por su talante verdat de cuanto menos por fablar lo de los omnes es o por más saber.

* Non deve omne fablar ante otro muy sueltamente fasta que entienda qué conparación ha entre el su saber et el del otro.

Et si más me afincáredes, avervos he a fablar en tal manera que vos converná de aguzar el entendimiento para las entender.

* Qui ha de fablar de muchas cosas ayuntadas es como el que desbuelve grand oviello que ha muchos cabos.

acabado, porque entendí que lo queríades vós, començé a fablar en este libro más avreviado et más oscuro que en el otro.

* Del fablar biene mucho bien, del fablar biene mucho mal.

* Usar la verdat, seer fiel, et non fablar en lo que non aprovecha, faz llegar a omne a grand estado.

Et porque estas cosas de que yo cuido fablar non son en sí muy sotiles, diré yo, con la merçed de Dios, lo que dixiere por palabras que los que fueran de tan buen entendimiento como don Jaime, que las entiendan muy bien, et los que non las entendieren non pongan la culpa a mí, ca yo non lo quería fazer sinon como fiz los otros libros, mas pónganla a don Jaime, que me lo fizo assí fazer, et a ellos, porque lo non pueden o non quieren entender.

el mío estado, fablar desta materia que de otra arte o sciençia.

Et so çierto que esto me dixo porque él es tan sotil et tan de buen entendimiento, que tiene por mengua de sabiduría fablar en las cosas muy llana et declaradamente.

-¡Locos, traidores!, ¿qué fazedes? ¿Cómo osades llegar a la puerta nin fablar? ¡Callad, sinon todos, también vós como yo, todos somos muertos!.

Et falló que un fijo de un rico omne que non era de muy grand poder, que segund lo que paresçía del en aquel escripto, que era el mejor omne et el más complido, et más sin mala tacha de que él nunca oyera fablar.

Et un día, cuando Saladín vino a fablar con el conde, desque ovieron acordado aquello porque Saladín allí viniera, fabló con él el conde en esta manera:.

Et él díxol’ que aquellas dos cornejas avían puesto de casar el fijo de la una con la fija de la otra, et que aquella corneja que començara a fablar primero, que dezía a la otra que pues tanto avía que era puesto aquel casamiento, que era bien que los casassen.

Et cuando en la predigaçión ovo de fablar daquel omne, dixo una palabra que dize el Evangelio, que dize assí: «Ubi est tesaurus tuus, ibi est cor tuum».

-Señor conde Lucanor -dixo Patronio-, en los grandes fechos et muy dubdosos son muy periglosos los consejos, ca en los más de los consejos non puede omne fablar çiertamente, ca non es omne seguro a que pueden recodir las cosas, ca muchas vezes viemos que cuida omne una cosa et recude después a otra, ca lo que cuida omne que es mal, recude a las vegadas a bien, et lo que cuida omne que es vien, recude a las vegadas a mal, et por ende, el que a dar consejo, si es omne leal et de buena entençión, es en muy grand quexa cuando ha de consejar, ca si el consejo que da recude a bien, non ha otras gracias sinon que dizen que fizo su debdo en dar buen consejo,.

-Don Cuervo, muy gran tiempo ha que oí fablar de vós et de la vuestra.

Et por ende començó a fablar con él en esta guisa:.

Et aquel genués adolesçió muy mal, et de que entendió que non podía escapar de la muerte, fizo llamar a sus parientes et a sus amigos, et desque todos fueron con él, envió por su muger et sus fijos, et assentósse en un palaçio muy bueno donde paresçía la mar et la tierra, et fizo traer ante sí todo su tesoro et todas sus joyas, et de que todo lo tovo ante sí, conmençó en manera de trebejo a fablar con su alma en esta guisa:.

las menguas que en ellos fallaren, non pongan la culpa a la su entençión, mas pónganla a la mengua del su entendimiento, porque se atrevió a se entremeter a fablar en tales cosas.

tan lleno que non sé fablar quien lo pueda.

Del pleito de Teofilo vos querria fablar,.

Ver si avrien seso de fablar los maderos.

Quitandose de follia de fablar en forniçio.

Por ond de la su Madre oviessen que fablar.