Ejemplos con espectros

Con este esfuerzo continuo lograron desarrollar una variante más moderna de los espectros, cazas aéreos superiores.

Lleno de pesar y el odio, Angra encabezó un ejército de demonios y espectros para derrocar al mundo de los hombres mortales.

Más apoyo para la teoría de cuerpo único proviene de los colores conocidos y de los espectros infrarrojos, similares a los asteroides de tipo D.

Desde entonces en las noches de febrero, aparecen dos figuras como espectros abrazados que se alejan hacia el castillo.

El estudio de los espectros de los operadores sobre un cierto espacio y sus propiedades se conoce como teoría espectral.

La obra de August Strindberg La sonata de los espectros se cierra con una imagen de La isla de los muertos, uno de los cuadros favoritos del dramaturgo.

Al enfrentarse a Voldemort, los espectros desparecen, y la piedra cae en medio del bosque.

Las hordas bárbaras del norte, los criminales espectros de la nieva, se acercan a la colonia.

Muchos de estos espectros, según la leyenda, se originaron debido a que desafiaron a Dios y a las leyes de Dios, y por eso son condenados a penar.

Si éste es el origen, los espectros indican que la composición del asteroide sería similar a la de la corteza terrestre, y que podría haber pertenecido a un cuerpo mayor no muy diferente a los planetas terrestres del sistema solar.

-Espectros Aullantes La mayoría son hembras Eldar muy ágiles, que utilizan espadas de energía, que ignoran la armadura, para atacar a la infantería pesada enemiga.

Estos libros son los bestiarios supernaturales, las colecciones de fantasmas, espíritus, espectros y monstruos, muchos de los cuales Toriyama basó en la literatura, folklore, y otras ilustraciones.

Se caracterizaba por destruirse tras del uso, dejando solo la empuñadura, además de convertir a los heridos en espectros similares a los Nazgûl, pero más débiles y manipulables.

La interpretación de este resultado fue que la estrella se alejaba y se acercaba dando lugar a los desplazamientos observados en los espectros.

El valor del ataque por sorpresa de las Átropos se ha aumentado gracias a otras modificaciones, que han permitido rescatar los campos de camuflaje de los espectros para que las naves Átropos ataquen incluso cuando el enemigo domina el cielo.

Pero como algunos fugitivos trajeron la noticia de la llegada del Ejército de Espectros, algunos Dromones estaban zarpando para huir hacía la otra orilla del Río Grande.

Esa noche la Compañía Gris acampa en el lugar aunque muy pocos pudieron dormir por el terror a los Espectros.

Tras cruzar los Senderos de los Muertos La Compañía Gris desciende hacia el Valle del Morthond, seguido por los Espectros de El Sagrario.

Energía Dom: Permite al domador crear rayos para paralizar aturdir a los monstruos y eliminar espectros negros.

De la zona profunda, negra y dormida de la memoria, laguna Estigia de nuestra alma, en donde se han ido sumiendo los afectos y las imágenes de antaño, se levantan, de raro en raro, inesperadamente, viejas voces y viejos rostros familiares, a manera de espectros sin corporeidad.

Ahuyentaría o ignoraría los espectros recónditos, que, de vez en cuando, se entrometen a perturbar el buen concierto de las potencias del alma y anublar la cálida luz del corazón, esos espectros que, aunque ofuscaciones de la imaginación, se proyectan sobre el mundo exterior en forma de figuras odiosas y agresivas, como si de veras existiesen en carne y hueso, y son sólo alucinaciones.

Así como en la noche los lóbregos e inmóviles pantanos respiran niebla blanca y fantasmal, así nuestra interior laguna Estigia deja en libertad sus vaporosos espectros a las horas en que la tiniebla del sueño satura nuestro espíritu.

Tendía los brazos al hablar con una voz doliente y monótona, igual a la de los espectros en las apariciones de teatro.

Eran un tropel de sombras que apenas si se marcaban en su memoria como espectros daltonianos, de visible contorno, pero sin color.

Fuera, los postes del telégrafo parecían una fila de espectros, los árboles sacudían su desmelenada cabeza, agitando ramas semejantes a brazos tendidos con desesperación pidiendo socorro, una casa surgía blanquecina, de tiempo en tiempo, aislada en el paisaje como monstruosa testa de granítica esfinge, todo confundido, vago, sin contornos, flotante y fugaz, a imitación de los torbellinos de humo de la máquina, que envolvían al tren cual envuelve a la presa el aliento de fuego de colérico dragón.

Manchas de luz se deslizaban lentamente por las pilastras, como fantasmas que descendiesen de las bóvedas, después arrastrábanse por el pavimento cual espectros rampantes, y otra vez volvían a remontarse por las pilastras, hasta perderse en lo alto.

Los árboles me parecían espectros, las luces de las chozas cirios que ardían delante de un cadáver.

Eran ellos que salían nuevamente a luz, primero como espectros, después como seres reales con cuerpo, vida y voz.

Creeríase que andaban espectros por allí, o al menos sombras de linterna mágica.