Ejemplos con bey
Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.
Bey es una población y comuna francesa, en la región de Ródano-Alpes, departamento de Ain, en el distrito de Bourg-en-Bresse y cantón de Pont-de-Veyle.
En sus letras, anuncian la inminencia del caos y la Discordia, y citan a diversos autores de la contracultura como Hakim Bey, Phil Hine, Timothy Leary o Robert Anton Wilson.
La retirada francesa de Urfa se acordó entre las fuerzas ocupantes y los representantes de las fuerzas locales, dirigidas por el capitán Ali Saip Bey, designado por el gobierno de Ankara.
También posee un rico patrimonio en esculturas: una pequeña Santa Bárbara transformada en Inmaculada, el Cristo de la Expiración de Sicagtegui, los grupos escultóricos de La Caridad de Antonio Bey Olvera, natural de San Fernando y La Borriquita.
Poco después en el navío Soberano echa a pique el Castillo Nuevo del Bey de Argel.
Bey ha reivindicó que la socialización es el procedimiento a través del cual los individuos adquieren el conocimiento, los costumbres y las orientaciones de valor que serán útiles en el futuro.
Los vocalistas que aparecen en dúos o tríos con otros artistas: Liberty Silver, Carroll Baker, Ronnie Hawkins, Murray McLauchlan, Véronique Béliveau, Robert Charlebois, Claude Dubois, Don Gerrard, Salome Bey, Mark Holmes, Lorraine Segato, Lisa Dalbello, Alfie Zappacosta, Paul Hyde y Carole Pope.
Estando en Estambul, fue nombrado bey de Samos, donde provó sus habilidades de liderazgo al conseguir eliminar la piratería local, la mayor parte de la cual iba dirigida en contra de los transportes que abastecían a los turcos en la Guerra de Crimea.
La ciudad debe su nombre a Karaman Bey, uno de los gobernantes de los karamánidas.
Rama de Gulisti, fundada por Inal Bey Shirvashidze, señor de Gulisti, segundo hijo de Djighesti Shirvadshidze de Abjasia.
en este capitulo trasgo roba el espiritu de la navidad y resucita a sus antiguos amos, mork, freya, billi, be,y el espectro de golnirn a quien les asigna casillas: negra para mork, amarilla para billi y ve, azul para el espectro, morada para freya e yrm coloca casillas verdes para el y trasgo utiliza sus casillas rojas.
Ladislao y Hunyadi desplegaron dos compañías de caballería y la caballería valaca desde el centro, y ordenaron el ataque en contra de los sipahis de Anatolia y los árabes, que fueron desbandados con su comandante, Karaca Bey, muerto en el ataque.
, a Jason McQuinn editor de la revista Anarquía: una publicación del deseo armado, Bob Black, Hakim Bey.
Es el castillo que Karamanid arrebatado a otomano Gedik Ahmet Pasha, y como resultado de este Pir Ahmet Bey se suicidó en el mismo.
El oficial Toufiq Bey Al Said, quien renunció a la policía de Jaffa, recibió un disparo en la calle, su muerte fue adjudicada a los veteranos de Hashomer en retribución por el asesinato de Brenner.
Gypsy Camp:tema de exotismo con guitarra de cuerdas como protagonista principal, aparece cuando Kerim Bey le presenta a Bond unas chicas gitanas.
Lo único cierto era que había vivido en Túnez en un palacio a orillas del mar, con una mora de espléndida belleza, parienta de su amigo el Bey.
¿Y si Mahomet Bey se negaba a mezclarse en la partida perdida? Podía refugiarse en el consulado alemán.
Si alcanzaba a reunirse con Mahomet Bey se reiría de los asesinos mudos que traía su padre.
-Estallan como granadas -decía, sonriendo, Mahomet Bey.
Mahomet Bey era un asesino profesional de armenios cristianos.
Mahomet Bey en las ciudades levantinas vestía como el más pulcro europeo.
Tenía que entrevistarse esa noche con Mahomet Bey, un bandido inexorable.
-¡La renuncia de Djamil! ¡Mardan Bey, primer ministro!.
-¡La renuncia de Djamil! ¡Mardan Bey, primer ministro! ¡La renuncia de Djamil! ¡Mardan Bey, primer ministro!.
Con esto acabó el buen Yahia de ganar la confianza del que tenía por poderoso señor musulmán, o renegado de alta escuela, al estilo de Alí Bey.
Despertó esto más la curiosidad de Juan y sus ganas de tratar a El Nasiry, para echarle la sonda y ver si en él se repetía el extraordinario ejemplo de Alí Bey El Abassi.
Lo cierto es que el Bey le nombró su visir, y que el hijo del mago crióse, tal que un príncipe, en el alcázar.
¡Ojalá no te engañes! Desde que salimos de Cádiz, sólo un miedo me sacudía el alma: no toparme con ese tiburón, de que tanto alardea el Bey.
