Ejemplos con respuesta

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Celemín se quedó con la obra para leerla y dar respuesta cumplida al día siguiente.
Este criado volvió antes que ningún otro, con la respuesta.
Por el gesto de mi respuesta, la duquesa, que era un lince, presumió la oculta causa.
¡Ya, ya!gruñó por toda respuesta el tabernero.
Pero éstos se le reían a las barbas por toda respuesta, y llevados del mejor deseo, y fundados en su experiencia, ni se arrepentían ni se enmendaban.
¡Como son conocidos de tantos a quienes ellos jamás han visto! Pero a bien que a mí, el temor de una fría respuesta no ha de quitarme el placer que recibo al estrechar la mano de una persona digna de todo mi respeto.
Si usted me permitiera meditar un poco sobre el particular, aplazar mi respuesta hasta dentro de unos días.
Al ver tan loca intemperancia, Julieta, por toda respuesta, miró a su madre con un gesto que daba la medida exacta de la capacidad de doña Juana, lanzó otra ojeada no menos expresiva ni más lisonjera a su padre, y salió del gabinete para encerrarse en el suyo, en el cual devoró en silencio muchas lágrimas de ira, y tal vez echó los cimientos de algún propósito rebelde.
Doña Juana no obtuvo respuesta a esta pregunta, porque su marido cayó al suelo como un tronco, sin soltar el telegrama que llevaba en la mano.
Si este mi deseo vivísimo les merece una respuesta favorable, diríjanmela por el correo, que yo cuidaré de recogerla en la lista.
Todos hicimos eco a su sonrisa, menos la vieja, que no acertaba a decidir si la respuesta era en serio o en chanza.
Gabriel eludió la respuesta, y siguió hablando de aquellos tiempos.
Y aguardó con mirada ansiosa la respuesta de Gabriel.
Después ya no quiso suplicar, conociendo de antemano la respuesta: Era un tormento calculado: le ofrecían agua cuanta quisiera, pero luego que delatase los nombres de los culpables, afirmando lo que no sabía.
Creyó Batiste oir gritos ahogados de mujer, choque de muebles, algo que le hizo adivinar una lucha de la pobre Pepeta deteniendo a , el cual quería salir para dar respuesta a sus insultos.
Algo tenía que decirle a su tío, pero le turbaban tanto los ojos interrogantes de éste, la calma con que esperaba su respuesta, que se le embrollaban sus pensamientos y no sabía cómo empezar.
Cuando terminaron las revelaciones sobre la situación de la casa, la viuda aguardó la respuesta de su hijo.
La respuesta fue cariñosa, pero evasiva.
La respuesta fue coger el mantón, y decirme.
Y a renglón seguido la consabida palabrita de casamientodijo mirándole de lleno y observándole indeciso en la respuesta.
Rompió a reír, a reír, y el Delfín tuvo que preguntarle muchas veces la causa de su hilaridad para obtener esta respuesta:.
Santa Cruz tardó algún tiempo en dar la debida respuesta.
Ido abrió la boca para emitir pronta y juiciosa respuesta a esta pregunta, pero su mujer tomó rápidamente la palabra, quedándose él un buen rato con la boca abierta.
Pero su talento le sugirió la respuesta, y dijo que no tenía ni pizca de dolor, sino frío, y sin más explicaciones se volvió contra la pared, pegándose a ella como un engrudo, y haciéndose el dormido.
¡Arrancar la cabeza a las figuras! Escondía el la cara muy avergonzado, y se metía el dedo en la nariz La mamá adoptiva no había podido obtener de él una respuesta, y las acusaciones rayaban en frenesí.
Tan distraída estaba, que el carnicero le preguntó tres veces lo que quería sin obtener respuesta.
Y sin esperar respuesta, dio media vuelta y salió de la casa a toda prisa, temiendo sin duda que su tía le agarrase por los faldones.
La monja pasaba trun, trun hiriendo los guijarros con aquel pie duro que debía ser como la pata de una silla, y no concedía a la prisionera ni respuesta ni mirada.
A ratos se preguntaba con sinceridad de dónde y cómo le había venido el fortalecimiento de aquella idea, mas no acertaba a darse respuesta.
Tantas preguntas le hizo esta y tanto cariño le mostró, que al fin obtuvo respuesta de la pobre mujer desolada, que no parecía tener consuelo ni hartarse nunca de llorar.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba