Ejemplos con despachando

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

En febrero, el Belle Poule capturó al Var en las afueras de Valona y los franceses respondieron despachando a las fragatas Danaé y Flore de Tolón.
El Presidente se alojó en los departamentos de la Prefectura donde siguió despachando y, con decisión y eficacia, tomó las disposiciones necesarias para que el Palacio pudiera estar habilitado a fin de mes, con motivo de las fiestas del Centenario.
En este cargo de máxima confianza empieza a mantener relación con los reyes despachando con estos habitualmente.
Manuscrito de la Biblioteca Nacional: Las alcahuetas llevan una cuenta muy cabal de sus tercerías y se hacen pagar muy bien los niños que van despachando, y seven detras colgados como cerros de lino.
Aquella misma tarde, pasado Abanto, Palazuelos y dos oficiales más, despachando juntos y aprisa un ligero tente-en-pie, me hicieron una descripción sintética de las bravas acciones que franquearon el paso hacia la ría de Bilbao.
El pobre señor no me entendía, y siguió despachando su tercio de rosario.
Yo me despediré de don Juan a las diez de la mañana, saliendo con mi equipaje, en dirección a Tortosa y Tarragona, con toda la tranquilidad que simular pueda, y a la mitad del caminito, poco más, en una villa nombrada Santa Bárbara, me detendré, despachando para Tortosa la tartana con mi maleta.
Leopoldina Pastor no se asustaba: de morir ella, moriría como Carlota Corday, despachando antes media docena de indecentes, como Marat.
Ratos había en que se quedaba embobado, despachando automáticamente lo que le pedían, hasta que la severa y desapacible voz de Frasquita venía a turbar sus arrobos con frases crueles.
Tan temprano, y ya había andado aquella mujer medio mundo, oído tres misas y visitado el asilo viejo y el que estaba en construcción, despachando de paso algunas diligencias.
El don Pepito y el brigadier Batalla están siempre juntos conferenciando ¡ay Jesús, Dios y Señor mío! conferenciando sobre sus infernales planes y despachando botellas de vino.
conferenciando sobre sus infernales planes y despachando botellas de vino.
Manuelito estaba ahí, había venido a buscar los vicios para la familia, y lo estaban despachando.
Así, recibiendo y despachando mensajes y mensajeros, ganábamos terreno rápidamente, de modo que no tardamos en avistar la nueva serie de embajadores en cuyas garras íbamos a caer.
Pero yo no podía decir a mi tío estas cosas que le hubieran lastimado mucho en la situación de ánimo en que se hallaba, y le entretenía despachando sus apremiantes instancias con evasivas corteses, pretextando negocios que no tenía, y apuntando «veremos» sin el menor propósito de cumplirlos.
Manuel Montes de Oca sin dar paz a su mente ni a la pluma, despachando los asuntos varios que en aquel embrión de Gobierno pendían de su autoridad como vicario indiscutible de Doña María Cristina, y desempeñaba su papel con tal fe y ardor, que era lástima no fueran aplicados a más práctico objeto.
Y el último que entró fue el gran visir, padre de Schehrazada, que llevaba debajo del brazo el sudario destinado a su hija, a la cual creía aquella vez muerta de veras, pero el rey no le dijo nada de tal asunto, y siguió juzgando y nombrando para los empleos, y destituyendo, y gobernando, y despachando los asuntos pendientes hasta terminar el día.
César, cuando supo por los que llegaban de Utica que Catón se mantenía allí sin pensar en huir, y que despachando a los demás él y su hijo y sus amigos atendían a todo sin mostrar recelo, no sabía qué pensar de aquella conducta, y como hiciese de él la mayor cuenta, siguió con el ejército apresurando la marcha, pero luego que oyó su muerte, se dice que exclamó: “¡Oh Catón, te envidio la gloria de tu muerte, ya que tú no me has querido dejar la de salvarte!” Porque, en realidad, el que Catón, habiendo esperado, hubiera debido la vida a César, más que en desdoro de su nombre, había de ceder en honor y gloria de éste.
En las subastas de las casas confiscadas se condujo con tal insolencia y despotismo, aun despachando en el tribunal, que más todavía que los despojos incomodaban las donaciones que de los bienes hacía, dando a mujeres bien parecidas, a tocadores de lira, a histriones y a lo más inmundo de la gente de condición libertina los campos de los pueblos enteros, las rentas de las ciudades y aun a algunos el matrimonio violento de mujeres casadas.
Mas como sucediese que sentado y despachando Camilo en la plaza llegase un lictor de parte de los tribunos de la plebe con orden de que le siguiera, y aun alargase hacia él la mano como para llevarle, suscitóse una gritería y alboroto, cual nunca se había visto en la plaza, echando del tribunal a empellones al lictor los que estaban con Camilo, y mandando a aquel muchos desde abajo que le llevase.
Y el heroico farmacéutico, sin salir de su gravedad habitual, hacía callar a los muchachos y seguía, en compañía de su dependiente, despachando a todos según su turno.
Y siguió nuestro amigo, cortando y cortando, como chanchero despachando galantina, hasta acabar con todo el animal, hasta la punta de la cola, sin haber precisado siquiera mudar cuchillo.
Desde luego, despachando correos a las ciudades de sus dominios a fin de que le aprontasen tropas, exigió a cada una un número mayor del que antes le habían dado de galeras, caballos, provisiones y barcas de transporte.
Mal habidos sus amigos con la real truhanería, se resolvieron por fin a dirigirle una reconvención en buenos términos: —«Señor, le dicen, esa llaneza con que os mostráis sobrado humilde y rastrero, no es la que pide el decoro de la majestad, pues lo que corresponde a un real personaje es ir despachando lo que ocurra, sentando magníficamente en un trono majestuoso.
Nadie quiere tener de vecino a un señor que ha «despachado el asunto» de ciento y tantas cabezas, y que está dispuesto a seguir fríamente despachando.
Aplaudieron todas al Arbitrio, obedeció él y deshízose la junta, despachando una de las aves a suplicar al donosamente sabio Esopo se dignase de añadir a los antiguos este moderno y ejemplar suceso.
Tras de lo cual se puso su traje de médico y el gran turbante de siete vueltas, y preparó también a Feliz-Bello, que había de ser su ayudante, despachando las recetas, machacando en el mortero, haciendo los saquillos y escribiendo los remedios que él le dictara.
Por aquí, dos pugilistas se hacen saltar los ojos a puñetazos, por allí un par de espadachines se atraviesan el cuerpo con una doble estocada, y cayendo sin vida, dejan sus armas a los testigos que continúan la pelea, despachando dos o tres al otro mundo, y van a acabar aquel negocio bebiendo sendos tragos en honor de los difuntos.
Pero el rey nada le dijo sobre esto, y siguió juzgando, concediendo empleos, destituyendo, gobernando y despachando los asuntos pendientes, y así hasta el fin del día.
Y empezó a desempeñar su cargo, despachando los asuntos pendientes y administrando justicia como si llevara muchos años de visir, y lo hizo tan a conciencia ante el sultán, que se maravilló de su inteligencia, de su comprensión para aquellos asuntos y de su admirable manera de administrar justicia, y le distinguió más aún, entrando en gran intimidad con él.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba