Ejemplos con atrevo

Muchas veces la mejor manera de entender el significado de una palabra, es leer textos donde aparece dicha palabra. Por ese motivo te ofrecemos innumerables ejemplos extraidos de textos españoles seleccionados.

Es una gracia que me atrevo a pediros de rodillas, con lagrimas en los ojos.
vos habeis sido mi hechura por mano del conde, y que aunque él se aparte mientras durare la cura, quedo yo aquí para favoreceros y honraros como siempre, y haceros espaldas en cuanto hubiéredes menester, pues el peso del gobierno y la dirección de los gobiernos ha de ser más inmediatamente por mi persona, que faltándome el conde no me atrevo a fiar de nadie lo que de él.
Me atrevo a decir que es peor para estos tiempos y tanto mejor para los Tarahumaras.
Publicó en variados diarios y revistas: Padre nuestro que estas en la Cruz, A María en su soledad, A que Señor me atrevo, Cantando lo haré, Era la Nochebuena, etc.
Por este motivo, todas ellas contenían veladas alusiones a su malograda relación, como aquella estrofa que reza: Ay de mí que siendo niña di la palabra a un moreno y ahora que ya soy mocita cumplirla no me atrevo.
Me atrevo a decir que sus obras de estatuaria pueden ponerse sin temor en competencia con las más raras de Europa.
Pero no me atrevo, no me atrevo.
Hoy, que es día de gloria, también yo me atrevo a pedirles que me perdonen.
Puede usted hacerme un favor muy grande Un favor que le agradecería mientras tuviese un soplo de vida Pero no me atrevo a pedírselo.
¿Por qué no me tratará mamá de tú, como tu papá? Díselo de mi parte yo no me atrevo.
A Lucía no me atrevo a preguntarle, como ella no me dice Él ha sido muy bueno con mamá, ¿no? ¡La directora lo quiere tanto! Mira, allí vuelve a pasar Pedro Real: ¡es buen mozo de veras! pero yo le hallo unos ojos extraños, no son tan dulces como los de Juan.
Estoy como el que descansa después de una marcha forzada, no me atrevo a moverme.
Pues yo me atrevo a desembarazarle de unadijo Andrés adoptando el mismo tono zumbón del paisano.
¡No me atrevo a repetirlo! Todavía, después de tantos años, ahora que de nadie necesito, ahora que si no soy rico, por lo menos vivo cómoda y decentemente, sin pensar en el dinero para el día de mañana, cuando recuerdo la hipócrita calumnia de Ricardo y las reticencias de don Juan, siento que me ahoga la sangre.
Pues con esa responsabilidad tan grande no me atrevo a aconsejarle.
Por respeto a mi padrino, no me atrevo a decir más.
Pero me parecía Ello podrá ser cosa física, pero ¿si no lo fuera? Si efectivamente Mauricia No es que yo lo afirme, pero tampoco me atrevo a negarlo.
Yo me atrevo a asegurar que es muchísimo menos.
Comprendí que me había conocido y que mis miradas la cohibían ¡Pobrecilla! Lo elegante no le quitaba lo ordinario, aquel no sé qué de pueblo, cierta timidez que se combina no sé cómo con el descaro, la conciencia de valer muy poco, pero muy poco, moral e intelectualmente, unida a la seguridad de esclavizar ¡ah, bribonas!, a los que valemos más que ellas digo, no me atrevo a afirmar que valgamos más, como no sea por la forma En resumidas cuentas, chico, está que.
Aquí no se tiene idea de lo que es el pueblo español Yo respondo de él, me atrevo a responder con la cabeza, vaya.
Esto me da tantos ánimos que me atrevo con todo.
Será una tontería, ¡ya sé que lo será!, pero no me atrevo a salir de mi habitación, yo que antes revolvía todos los rincones y andaba por todas partes.
Rafael dijo a Leocadia, declarándole su alma, que fueron tantas y tales, que no me atrevo a escribirlas? Mas pues es forzoso decir algunas, las que entre otras le dijo, fueron estas:.
De lo que a mí me pesa es, que estoy tan cerca de mi acabamiento, que no tendré lugar de verlo: muchas veces he querido preguntar a mi cabron qué fin tendrá vuestro suceso, pero no me he atrevido, porque nunca a lo que le preguntamos responde a derechas, sino con razones torcidas y de muchos sentidos, así que, a este nuestro amo y señor no hay que preguntarle nada, porque con una verdad mezcla mil mentiras, y a lo que he colegido de sus respuestas, él no sabe nada de lo por venir ciertamente, sino por conjeturas: con todo esto, nos trae tan engañadas a las que somos brujas, que con hacernos mil burlas, no le podemos dejar: vamos a verle muy léjos de aquí a un gran campo, donde nos juntamos infinidad de gente, brujos y brujas, y allí nos da de comer desabridamente, y pasan otras cosas, que en verdad, y en Dios y en mi ánima, que no me atrevo a contarlas segun son de sucias y asquerosas, y no quiero ofender tus castas orejas: hay opinion que no vamos a estos convites sino con la fantasía, en la cual nos representa el demonio las imágenes de todas aquellas cosas que despues contamos que nos han sucedido: otros dicen que no, sino que verdaderamente vamos en cuerpo y en ánima, y entrambas opiniones tengo para mí que son verdaderas, puesto que nosotras no sabemos cuándo vamos de una o de otra manera, porque todo lo que nos pasa en la fantasía es tan intensamente, que no hay diferenciarlo de cuando vamos real y verdaderamente: algunas esperiencias desto han hecho los señores inquisidores con algunas de nosotras que han tenido presas, y pienso que han hallado ser verdad lo que digo.
Pues, como yo tengo esto en el magín, me atrevo a hacerle creer lo que no lleva pies ni cabeza, como fue aquello de la respuesta de la carta, y lo de habrá seis o ocho días, que aún no está en historia, conviene a saber: lo del encanto de mi señora doña Dulcinea, que le he dado a entender que está encantada, no siendo más verdad que por los cerros de Úbeda.
Otra cosa querría dijo el labrador, sino que no me atrevo a decirlo, pero vaya, que, en fin, no se me ha de podrir en el pecho, pegue o no pegue.
La verdad que diga respondió Sancho, las desaforadas narices de aquel escudero me tienen atónito y lleno de espanto, y no me atrevo a estar junto a él.
De Reinaldos respondió don Quijote me atrevo a decir que era ancho de rostro, de color bermejo, los ojos bailadores y algo saltados, puntoso y colérico en demasía, amigo de ladrones y de gente perdida.
En lo que toca a lo que dicen que ésta es bacía, y no yelmo, ya yo tengo respondido, pero, en lo de declarar si ésa es albarda o jaez, no me atrevo a dar sentencia difinitiva: sólo lo dejo al buen parecer de vuestras mercedes.

© Todos los derechos reservados Buscapalabra.com

Ariiba